martes, 11 de noviembre de 2008

ENUNCIACION: FRAGMENTOS HETEROSITAS....................................Robert Urgoite

Asistimos a un lamentable fracaso. Determinados por el automatismo y la repetición. La estúpida muerte de lo inmediato, la desesperación, el futuro embargado, el facilismo nos pica los dientes y pudre los sentidos. Un fracaso que siquiera llegó a ser nuestro. Violencia y miedo en cadenas que desentierran una genealogía olvidada. Aun flotan calientes las tripas en el cebadero del Anglo, nunca terminamos de amaestrarnos, tampoco pudimos explorar algo más allá del presente. La basura, la grasa y la comodidad corrompieron nuestros procesos inteligentes. Estímulo y respuesta configuran un mecanismo que apenas nos sirve para fomentar quejas, arrepentimientos y veneno.
El desprecio por lo auténtico, el sacrificio de lo genuino y la escaza influencia de nuestra memoria, condena que cumplimos convencidos. Festejamos nuestra incapacidad de creer, de imaginar, de soñar. Nuestra fe se empobrece con lamentos y promesas, apenas fantaseamos con enfermedad y dolor. Nuestra sensibilidad nos da vergüenza y sentimos culpa cuando experimentamos la sorpresa. Nos civilizamos con cintos y cachetazos, pensamos que educación es disciplina moderna y naturalizamos la mentira y la traición, principalmente, a esos nosotros mismos, que en realidad son espacios residuales de resistencia. El deseo se conduce y se detiene en la apariencia, imperio de la hipersuperficialización de la existencia. Perdemos nuestra afectividad en una reglamentación que legitima el abuso y la desconsideración. Dañamos lo que queremos y deseamos sin saber, y nos cansamos de pensar. Despedazados nos mantenemos. Quietos y a los gritos. Paisaje que amerita la emergencia de procesos que se orienten a la recuperación de la naturalidad, recorriendo singularidades, intentando respeto, sinceridad. La disposición debe cambiar, se necesita improvisación, fuego y horizonte. Música. Llantos, abrazos, comida, agua, tiempo. Urgencias que compartimos, cultura que postergamos, atrapados en identidades clandestinas y cotidianidades bonsái que nos lastiman con argumentos que impiden el desarrollo inteligente. La pregunta es pertinente, no la duda, la confianza, no la seguridad, el análisis, el sabor, la integridad. Recuperación del cuerpo, rescate de la conciencia. Invocación de lo deforme, reactivación de los procesos trancados, reconstrucción del barrio, resignificación de la familia, significación de la comuna. Organización. Compromiso. Movimiento. Activación. Explicaciones y continuidad. Dependemos de lo exclusivo de nuestra existencia, sencillez y complejidad. Reconocimiento.

Robert Urgoite
10/11/08

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy buena costrucción, el final es abrumador y muy lúcido. Te felicito.
J.